¿Qué es una sociedad inactiva?
Una sociedad comercial inactiva es aquella empresa que ha cesado en su actividad comercial y no está generando ingresos significativos. En otras palabras, es una compañía que ha dejado de operar por diversas razones, como falta de rentabilidad, cambios en el mercado o decisiones estratégicas. A pesar de seguir existiendo legalmente, esta sociedad no realiza ninguna actividad comercial o de negocios y no tiene empleados ni ventas en curso. En Tu Empresa en 24H podrá comprar empresa 24 horas.
Este tipo de sociedades, también conocidas como sociedades ‘en blanco’ o ‘sociedades muertas’, suelen conservarse por distintas razones. Algunos empresarios optan por mantener una sociedad comercial inactiva para evitar los trámites legales de cierre o liquidación, mientras que otros pueden utilizarla como una estructura legal para futuros negocios o inversiones. Sin embargo, es importante destacar que estas sociedades no generan beneficios económicos directos y suelen tener mínimos gastos operativos.
¿Por qué queda inactiva una sociedad?
Hay diversos motivos por los que se termina con una sociedad inactiva. La razón principal por la cual estas sociedades optan por no disolverse está relacionada principalmente con el alto precio que implica dicho proceso.
Estos costes incluyen la preparación de escrituras de disolución y liquidación ante un notario, la liquidación de deudas con acreedores y proveedores, la presentación de impuestos y la inscripción de la disolución y liquidación en el Registro Mercantil, así como el trámite de baja en el censo de la Agencia Estatal Tributaria (AEAT) y la presentación del impuesto de sociedades final.
En la mayoría de los casos, los costes derivados de este proceso oscilan entre los 1.000 y los 1.500 euros. Por esta razón, muchas veces se opta por mantener la sociedad inactiva sin proceder a su disolución.
A pesar de que una sociedad permanezca inactiva, la Administración exige el cumplimiento de ciertas normas, las cuales, en caso de no ser cumplidas, pueden acarrear sanciones y multas significativas.
Obligaciones fiscales y mercantiles
En cuanto a las obligaciones fiscales, es importante destacar que toda sociedad inactiva está obligada a presentar el Impuesto de Sociedades. Sin embargo, en el momento de realizar la declaración, se deberá marcar la casilla correspondiente a entidades inactivas, indicando así la situación de la sociedad.
Por otro lado, desde el cese de actividad, las sociedades inactivas ya no estarán obligadas a presentar modelos trimestrales de IVA. No obstante, es fundamental informar a la Agencia Tributaria sobre el período de inactividad de la empresa para evitar posibles sanciones.
En cuanto a las obligaciones mercantiles, es necesario tener en cuenta que las sociedades inactivas deben llevar su contabilidad al día y presentar los balances y resúmenes anuales correspondientes. También es importante realizar la legalización de los libros contables.
Es importante destacar que, ante la inactividad de la empresa, es necesario realizar la baja de los Administradores en la Seguridad Social. Este trámite es fundamental para evitar futuros problemas y sanciones económicas.
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En resumen, las sociedades inactivas tienen tanto obligaciones fiscales como mercantiles. Es fundamental cumplir con todas estas obligaciones para evitar posibles multas y sanciones que pueden oscilar entre 1.200 y 60.000 euros, dependiendo del tamaño de la sociedad. Si su empresa está en esta situación y necesita asesoramiento en gestión, no dude en contactar con nuestros profesionales expertos en el área. En Tu Empresa en 24H contamos con amplia experiencia en la creación y venta de sociedades limitadas, ampliadas o anónimas, así como en el asesoramiento y gestión de sociedades inactivas.
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